Hoy os hablo del Quimiocerebro, o como actualmente comienza a denominarse Deterioro Cognitivo asociado al Cáncer. Creo que es un tema al que se le da poca voz y que como profesionales deberíamos acercar a aquellos pacientes que lo sufren.

Qué es Quimiocerebro

Quimiocerebro toma el nombre del inglés Quemobrain; originalmente se definía como un daño cerebral producido por el tratamiento del cáncer. Este daño derivaba en una alteración de las capacidades cognitivas de los pacientes, tanto durante como después del tratamiento. Tras numerosas investigaciones a lo largo del tiempo, se ha llegado a comprobar que no solo la quimioterapia forma parte del suceso, sino que el Quimiocerebro es multifactorial. Entendemos por multifactorial que este suceso sea secundario al cáncer, su tratamiento o ambos. Es por esto que actualmente es más correcto denominar al fenómeno del Quimiocerebro como Deterioro Cognitivo asociado al Cáncer.

Etiología, cuál es su origen

Como ya he adelantado, el Quimiocerebro es multifactorial y acumulativo, por lo que un caso puede envolver varios factores de riesgo a la vez.

Algunos de los factores relacionados al cáncer son:

  • La quimioterapia: daño en la estructura de la sustancia blanca.
  • Relacionado directamente al cáncer (localización, estadio…).
  • Asociados al paciente (estrés afectivo, red de apoyo, edad, educación, factores nutricionales…).

Por otro lado, también mencionar los factores predictores de déficits cognitivos producidos por la quimioterapia:

  • El tratamiento per se: altas dosis de quimioterapia, algunos fármacos empleados en el proceso…
  • Características individuales: genéticas, reserva cognitiva, edad, estilo de vida, estado psicoemocional…

Evolución del Deterioro Cognitivo asociado al Cáncer

La recuperación de esta alteración en supervivientes al cáncer varía según estudios. Sin embargo, la mayoría coincide en que este deterioro cognitivo se prolonga a lo largo de la vida en su mayoría. Muchos de esos supervivientes afirman notar complicaciones en su día a día (trabajo, relaciones sociales, actividades cotidianas…).

Al no haber consenso acerca de la evolución del deterioro cognitivo asociado al cáncer, se puede decir que su pronóstico es variable. Es decir, esta alteración cognitiva puede empeorar o persistir en el tiempo, así como mejorar o estabilizarse. En su mayoría los déficits son de severidad leve a moderada. El papel del Neuropsicólogo en estos casos es esencial para la valoración, diagnóstico y recomendación de las intervenciones adecuadas a cada casuística.

Rehabilitación de las capacidades cognitivas (neurorrehabilitación)

Como mencionaba, el papel del Neuropsicólogo es vital en estos sucesos. Cuando un paciente o superviviente al cáncer experimenta dificultades en su rendimiento diario (trabajo, manejo de aplicaciones, tareas del día a día…) es importante que consulte a un especialista. El Neuropsicólogo realizará una valoración neuropsicológica por la cual pueda evaluar el caso, diagnosticar y finalmente proponer una intervención adecuada.

También es importante el apoyo psicológico para la aceptación de la nueva situación vital. El psicólogo trabajará con el paciente no solo aquellos aspectos cognitivos en los que ahora profundizaré, sino también en el proceso de pérdida y aceptación de su actual situación. El profesional de la psicología aportará sesiones de psicoeducación al paciente y sus allegados para comprender qué es lo que está ocurriendo y cómo se desarrollará el proceso de cambio.

Las sesiones de neurorrehabilitación tienen como finalidad mejorar el desempeño cognitivo y funcional del usuario. Gracias a la Rehabilitación Cognitiva, podemos llegar a recuperar habilidades aparentemente perdidas. ¿Cómo ocurre? En caso de dificultades en alguna capacidad como por ejemplo la atención, el profesional propondrá actividades que estimulen aquella habilidad, para así mejorar su rendimiento. Por otro lado, en caso de pérdida de la capacidad de aprendizaje y memoria, el profesional trabajará con el usuario distintas estrategias de compensación que le ayuden en su vida diaria. 

Principales objetivos de la Rehabilitación Cognitiva

Con esta intervención neuropsicológica lo que los profesionales buscamos es mejorar la calidad de vida de los pacientes que solicitan nuestra ayuda y de la que les rodean. Algunos de los principales objetivos de esta intervención serán:

  • Estimular la plasticidad neuronal (rehabilitar conexiones cerebrales y por lo tanto recuperar o mejorar su rendimiento).
  • Mejorar las capacidades cognitivas perdidas.
  • Aumentar la autoestima.
  • En definitiva: ganar mayor independencia en la vida diaria del paciente.

Es muy importante que nunca olvidemos que el apoyo social y psicológico es vital para el adecuado transcurso de la terapia y la motivación y mejora del paciente.

En caso de encontrarte en una situación similar a la descrita en esta entrada, no dudes en contactar conmigo para solicitar información sobre el tema.

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